30 de julio de 2007

La dosificación de fotos es una habilidad a cultivar. Cuando algunas personas que se han ido de viaje con sus cámaras vuelven con 500 fotos y pretenden que veamos cada una de ellas, hay algo que va mal. Puede que ellas mismas vean como por primera vez la imagen gatillada. Pesadez y sopor, la contemplación de foto tras foto tras foto se vuelve secreto odio hacia quien nos castiga de ese modo.

Mejor que eso, tener fotos privilegiadas, y reconocer momentos clave para mostrar una u otra, hacen al cultivado en tales sorpresas, que bien agradecemos.

2 comentarios:

  1. síiiiiiiiiiiii, totalmente. odio a esa gente absorbente que te hace leer mil poemas que escribió la última semana.
    un poco de compostura, chabón, habría que decirles.

    ResponderBorrar
  2. Mmmm, Mara, qué duda. Dos o tres veces te he acribillado a poemas, y encima por chat... Espero que sepas disculpar esas pasadas incontinencias.

    Muchos cariños.

    ResponderBorrar

Micrófono abierto a las voces del alma de turno.